Reseña - dos: de Brasil con amor

Raúl Seixas:

este es el nombre de uno de los artistas más extraños e inclasificables que dio el Brasil contemporáneo. Nacido en 1945 y fallecido en 1989, inició en los setenta una carrera como músico y letrista (uno de sus más conocidos colaboradores había sido nada más ni nada menos que el escritor Paulo Coelho) en la que hizo posible la mezcla explosiva de rock lisérgico con folklore nordestino, samba y candomblé. Este sitio incluye biografía, discografía, letras, fotografías y mp3. Les aseguro que a través de esta figura se viene abajo cualquier estereotipo sobre la música brasileña, mostrándonos una de sus gamas más experimentales (todo bien con Caetano Veloso, pero Brasil es -por suerte- mucho más que Caetano).

Biografía y discografía de artistas brasileños:

en realidad, el sitio se llama CliqueMusic. Quien quiera acercarse a esa cosa inclasificable que es Brasil, aquí va a encontrar un ordenamiento alfabético de los autores con sus respectivas biografías, sus discos, las críticas de esos discos y algunas muestras en formato mp3 para que el visitante pueda apreciarlos. La página también facilita la búsqueda por estilos. Allí pueden toparse con bandas y solistas inusitados por la originalidad y la fuerza de sus propuestas: O Rappa, Zé Ramalho, Guinga, Mestre Ambrosio, Tom Zé, DjDolores, Engenheiros do Hawaii. Ideal para músicos que no quieren quedarse con lo que las radios y la MTV ofrecen. Al igual que todos los sitios reseñados aquí.

Todos os cantos:

Página brasileña promovida por el Servicio Social de Comercio de la ciudad de San Pablo, Brasil. Muy recomendada en cuanto da noticia de los eventos musicales que se dan a modo de intercambio en esta ciudad y, sobre todo, de las diversas modalidades de la música popular a nivel mundial. ¿Tienen idea de quiénes son, por ejemplo, Arnaldo Antunes, Hermeto Pascoal, The Klezmatics, Kimo Pohjonen, Lokua Kanza o Alceu Valença? Bueno, hasta no hace mucho tampoco yo lo sabía; en mi opinión, son unos monstruos que la están rompiendo y que esperan un buen par de oídos atentos. Es decir, los de todos ustedes y nosotros.